EL EFECTO MARIPOSA

EL EFECTO MARIPOSA

Literalmente el 14 de Enero de 2020 estaba viviendo un torbellino de nuevas emociones, nuevas caras y realidades desconocidas para mí en ese momento. Me encontraba en una nave industrial convertida en un plató de televisión a las afueras de Madrid, dónde, sin aún ser muy consciente de ello estaba exponiéndome a una audiencia potencial de más de 2.000.000 de personas.

Y lo que me salió del alma en aquel momento, fue decirles a los 3 jueces que me evaluaban como posible candidata a concursante de Masterchef 8, que a mí la vida ya me había enseñado mucho desde el dolor y que ahora me posicionaba en aprender desde el disfrute.

Brindo por ello

Y así es, creo que la vida es una aventura maravillosa que hay que beberse a tragos cortos o largos o cómo cada uno quiera, pero que no nos quede nada por vivir y disfrutar.

Pero es que, además, siento que no sólo debe disfrutar el cuerpo, sino también el alma, y las almas siempre tienen propósitos que van más allá de los sueños egóticos de cada uno, cada alma viene a este mundo a tocar otras almas y a dejar una huella, por pequeña que sea en cada una de las personas que tocamos.

Si yo he conseguido dejar algo de huella en mi paso por el programa sólo vosotros lo diréis.  Lo cierto es que yo quería abrir aquellas mentes que nunca habían tenido cerca una realidad como la mía, no somos héroes, ni campeones, ni ningún adjetivo superlativo, únicamente somos personas que hemos perdido la movilidad de parte de nuestro cuerpo y que con el tiempo y con esfuerzo nos hemos adaptado a nuestras circunstancias y que desde ahí queremos vivir una vida plenamente feliz.

No luchamos o mejor dicho, yo no lucho, he descubierto que es más fácil y rápido fluir, no me gustan las batallas ni los conflictos, no me gusta revindicar, ni exigir, ni siquiera pelear, pero si siento que para que la vida se acomode a todos, para que haya huecos para todas las realidades, estas deben mostrarse al mundo, tal y cómo son, porque si no se conocen, ¿desde dónde se van a cambiar?

Nos calificamos como una sociedad avanzada y cosmopolita que todo lo sabemos y lo que no, lo buscamos en Google, pero ¿y la empatía?, ¿dónde queda?

Si tu diseñas edificios y casas ¿te has parado a pensar lo que supone una escalera? Y si haces aviones, ¿Te has planteado cómo llega una persona que no camina y ha dejado su silla de ruedas en la bodega del avión, hasta el baño? y ¿de qué manera de mueve dentro del escaso par de metros cuadrado sin barras ni silla auxiliar? ¿Cómo sabe una persona invidente lo que hay en la carta de tu restaurante si no se la facilitas en brille? Podría seguir hasta el infinito, hoteles, colegios, campings, empresas de alquiler de coches….

Pero de lo que yo quiero hablaros es de la empatía, de hacer el ejercicio de ponernos en la posición del otro para luego tomar acción y así cambiar nuestros actos e incluso nuestras palabras, ¿sería bonito verdad?

Pero para que eso pase, primero hay que conocer las realidades de cada uno, y para ello vivimos en la era de la información, plataformas y medios no nos faltan, quizás si que nos falte ganas de evolucionar y construir un mundo mejor para todos. Horas y horas de contenidos vacíos o que repiten los mismos clichés y estereotipos hasta la saciedad. TVE es la televisión de todos, deseo que, cómo a mí me la dio hace 1 año, dé cabida a más realidades diferentes, con el único objetivo de aprender y empatizar.

Soy una idealista, lo sé, una soñadora sin los pies en la tierra, ya me lo decía mi abuela, me cuesta resignarme, pero yo sigo creyendo en el efecto mariposa, y ojalá en todo este año, con mi paso por el programa y mi contenido en RRSS haya conseguido abrir una única mente, que cuál ficha de dominó, haya implementado un cambio en el mundo para adaptarlo y mejorarlo a todas las realidades.